Maternal

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Preguntas Frecuentes Succionadores

Los succionadores Babelito te ayudan a extraer de leche materna y alimentar a tu bebé sin pasarla de un recipiente a otro. De este modo, evitás la pérdida de sus valiosos nutrientes y la posible contaminación que podría resultar del traslado.
La mejor forma de alimentar a tu bebé durante sus primeros meses de vida e inclusive hasta los 18 meses, es que tome leche materna directamente de tu pecho. Al principio esta leche será su alimento exclusivo y después, llegado el momento adecuado, agregás alimentos sólidos. Los succionadores manuales de leche materna Babelito pueden ayudarte cuando necesites que alguien más alimente a tu bebé ya sea que vuelvas al trabajo, tengas que salir, quieras que alguien de la familia lo haga o tengas alguna complicación médica como por ejemplo: pezones umbilicados, taponamiento de conductos, mastitis, pezones agrietados, bebés prematuros, bebés con succión muy débil, hipogalactia (poca leche), relactancia, hipergalactia (mucha leche) y congestión mamaria posparto.

Antes del primer uso y después de cada uso, lavá todas las partes del succionador/biberón por separado en agua tibia con detergente suave y enjuagalas bien. Luego esterilizá todos los componentes del biberón, en agua hirviendo durante 5 minutos.
Esterilizá los componentes del succionador de la siguiente manera: en una olla abierta calentá agua hasta su hervor y apagá el fuego, luego sumergí todas las piezas por NO MÁS DE 5 MINUTOS; retirá las piezas del agua y dejalas reposar a temperatura ambiente por 10 minutos, luego ensamblalas para su uso.

  • Ensamblá la pera a la rosca de la pera presionando el reborde dentro de la misma.
  • Enroscá la rosca de la pera y el biberón al cuerpo del succionador.
  • Ayudá al sellado entre tu pecho y el embudo del succionador humedeciéndolos donde hacen contacto.
  • Comprimí la pera mientras presionás el embudo contra tu pecho.
  • Ayudá a que comience la secreción de leche haciendo presión sobre el pecho cuando suelta la pera. Si con esta técnica no sale leche, aplicá compresas calientes sobre tu pecho y extraé algunas gotas de leche a mano antes de volver a utilizar el succionador de leche.
  • Revisá la pera de goma con regularidad y si notás algún deterioro, reemplazala por una sana.

Lavá cuidadosamente todas las partes del succionador y luego esterilizalas en agua hirviendo durante 5 minutos en un recipiente abierto, antes de cada uso. Para lavar usá detergente neutro y luego enjuagá bien con agua tibia quitando bien los residuos de leche. Importante: No esterilices la pera.

  • Colocá la cubierta de taza en la taza del succionador.
  • Introducí el diafragma en la parte posterior del cuerpo del succionador.
  • Colocá el cabezal de la válvula en la válvula e introducilos en la base del cuerpo del succionador.
  • Enroscá la cubierta del diafragma en la parte posterior del cuerpo del succionador.
  • Estirá hacia fuera el eje del diafragma hasta calzarlo en la cavidad interna de la palanca. Luego calzá la bisagra de la palanca al cuerpo del succionador.
  • Enroscá el cuerpo del succionador ya ensamblado a la botella.
  • El succionador está listo para usar.
  • Para una mejor adaptación podés utilizar agua para humedecer un área circular distante a un par de centímetros de tu pezón, así mejora el vacío alrededor de la taza, facilitando la extracción de leche materna.
  • Asegurate de que el succionador esté correctamente armado antes de usarlo.
  • Lavate bien las manos y chequeá que los pechos estén limpios. Para comprobar que tus conductos mamarios no estén obstruidos, apretá suavemente los pezones y fijate si aparece leche.
  • Colocá la tasa sobre la mama con el pezón en el centro, asegurate de que no pueda escapar aire, ya que de lo contrario no se producirá la succión.
  • Mantené el succionador en posición vertical de forma que la leche pueda fluir hacia abajo y dentro del mismo.
  • Realizá la extracción hasta que el flujo de leche disminuya, entonces comenzá la extracción de la otra mama.
  • Si te duelen las mamas al realizar la extracción bombea más lenta y rítmicamente, presionando la bomba sólo hasta la mitad. Tratá de mantener un ritmo de bombeo de 2 a 3 segundos. Si el dolor continúa, consultá a su médico.
  • Al terminar la extracción mantené el succionador en posición vertical y desenroscá la botella del resto del succionador.
  • Si deseás alimentar a tu bebé inmediatamente ensamblá la tetina a su rosca y luego enroscá a la botella.
  • Si no deseás alimentar a tu bebé inmediatamente recordá que tenés que guardar la leche materna en la heladera y se mantiene en buen estado por 24 horas, no guardes la leche en la puerta del refrigerador ya que la temperatura en ese lugar sufre grandes variaciones. Te recomendamos que consultes a tu médico sobre como guardar, congelar, descongelar y calentar la leche extraída. Atención: una vez congelada y descongelada, la leche no podrá volver a congelarse.

Lavá cuidadosamente todas las partes del succionador y luego esterilizalas en agua hirviendo durante 5 minutos en un recipiente abierto, antes de cada uso. Para lavar usá detergente neutro y luego enjuagá bien con agua tibia quitando bien los residuos de leche. Importante: No esterilices la pera.

  • Introducí el diafragma en la parte posterior del cuerpo del succionador.
  • Enroscá la cubierta del diafragma en la parte posterior del cuerpo del succionador.
  • Estirá hacia fuera el eje del diafragma hasta calzarlo en la cavidad interna de la palanca. Luego calzá la bisagra de la palanca al cuerpo del succionador.
  • Enroscá el cuerpo del succionador ya ensamblado a la botella.
  • El succionador está listo para usar.
  • Para una mejor adaptación podés utilizar agua para humedecer un área circular distante a un par de centímetros de tu pezón, así mejora el vacío alrededor de la taza, facilitando la extracción de leche materna.
  • Asegurate de que el succionador esté correctamente armado antes de usarlo.
  • Lavate bien las manos y chequeá que los pechos estén limpios. Para comprobar que tus conductos mamarios no estén obstruidos, apretá suavemente los pezones y fijate si aparece leche.
  • Colocá la tasa sobre la mama con el pezón en el centro, asegurate de que no pueda escapar aire, ya que de lo contrario no se producirá la succión.
  • Mantené el succionador en posición vertical de forma que la leche pueda fluir hacia abajo y dentro del mismo.
  • Realizá la extracción hasta que el flujo de leche disminuya, entonces comenzá la extracción de la otra mama.
  • Si te duelen las mamas al realizar la extracción bombeá más lenta y rítmicamente, presionando la bomba sólo hasta la mitad. Tratá de mantener un ritmo de bombeo de 2 a 3 segundos. Si el dolor continúa, consultá a tu médico.
  • Al terminar la extracción mantené el succionador en posición vertical y desenroscá la botella del resto del succionador.
  • Si deseás alimentar a tu bebé inmediatamente ensamblá la tetina a su rosca y luego enroscá a la botella.
  • Si no deseás alimentar a tu bebé inmediatamente recordá que tenés que guardar la leche materna en la heladera y se mantiene en buen estado por 24 horas, no guardes la leche en la puerta del refrigerador ya que la temperatura en ese lugar sufre grandes variaciones. Te recomendamos que consultes a tu médico sobre como guardar, congelar, descongelar y calentar la leche extraída. Atención: una vez congelada y descongelada, la leche no podrá volver a congelarse.

Antes del primer uso y después de cada uso, lavá todas las partes del succionador/biberón por separado en agua tibia con detergente suave y enjuagalas bien. Luego esterilizá todos los componentes del biberón, en agua hirviendo durante 5 minutos.
Esterilizá los componentes del succionador de la siguiente manera: en una olla abierta calentá agua hasta su hervor y apagá el fuego, luego sumergí todas las piezas por NO MÁS DE 5 MINUTOS; retirá las piezas del agua y dejalas reposar a temperatura ambiente por 10 minutos, luego ensamblalas para su uso.

No, no cualquier biberón es compatible con estos succionadores. El biberón compatible es el que viene con el succionador.

  • Revisá que el succionador esté correctamente armado antes de usar.
  • Lavate bien las manos y chequeá que tus pechos estén limpios. Para comprobar que tus conductos mamarios no estén obstruidos, apretá suavemente los pezones y fijate si aparece leche.
  • Colocá la tasa sobre la mama con el pezón en el centro, asegurate de que no pueda escapar aire, ya que de lo contrario no se producirá la succión.
  • Comprimí y descomprimí, puede ayudar a comenzar la secreción de leche haciendo presión sobre el pecho.
  • Mantené el succionador en posición vertical de forma que la leche pueda fluir hacia abajo y dentro del mismo.
  • Realizá la extracción hasta que el flujo de leche disminuya, entonces comenzá la extracción de la otra mama.
  • Si te duelen las mamas al realizar la extracción bombea más lenta y rítmicamente, presionando la bomba sólo hasta la mitad. Tratá de mantener un ritmo de bombeo de 2 a 3 segundos. Si el dolor continúa, consultá a su médico.
  • Al terminar la extracción mantené el succionador en posición vertical y desenroscá la botella del resto del succionador.
  • Si deseás alimentar a tu bebé inmediatamente ensamblá la tetina a su rosca y luego enroscá a la botella.
  • Si no deseás alimentar a tu bebé inmediatamente recordá que tenés que guardar la leche materna en la heladera y se mantiene en buen estado por 24 horas, no guardes la leche en la puerta del refrigerador ya que la temperatura en ese lugar sufre grandes variaciones. Te recomendamos que consultes a tu médico sobre como guardar, congelar, descongelar y calentar la leche extraída. Atención: una vez congelada y descongelada, la leche no podrá volver a congelarse.

Es importante que estés cómoda y relajada para que la leche fluya con más facilidad.

Si vas a utilizar la leche extraída dentro de las primeras 24 horas, mantenela en la heladera en una botella esterilizada. En caso de no utilizarse en ese período, hay que congelarla. Antes de congelar la leche extraída, esta debe mantenerse en la heladera dos horas.
Podés guardar leche congelada durante de 3 meses. Una vez congelada y descongelada, la leche materna no puede volver a congelarse; la misma debe mantenerse en la heladera y usarse dentro de las 24 horas. Recordá etiquetar en cada biberón la fecha de extracción, para no olvidar cuando fue extraída.

Para descongelar la leche extraída, poné el biberón en un recipiente con agua caliente (no debe estar hirviendo) o dejá que se descongele durante la noche dentro de la heladera. No uses el microondas para descongelar o calentar la leche ya que este proceso destruirá los nutrientes en la leche materna. Recordá que una vez descongelada la leche materna no debe volver a congelarse.

Preguntas Frecuentes Pezoneras

No, nuestras pezoneras vienen en un único talle.

Diseñamos nuestras pezoneras de silicona para ayudarte a amamantar a tu bebé cuando tengas los pezones lastimados o invertidos. Te recomendamos consultar con tu médico si tenés dudas sobre cuándo y cuánto tiempo utilizar las pezoneras.

Primero chequea que la pezonera esté limpia y esterilizada. Luego, con tu pecho recién lavado, invertí el borde de la pezonera y colocá la punta para que cubra tu pezón y la mayor área del pecho posible. Si lo deseas, podes usar una pequeña cantidad de crema humectante alrededor del borde para mejorar el ajuste y el confort.

Antes del primer uso y luego cada vez que las utilices, lavalas con agua tibia y detergente neutro, finalmente esterilizalas en agua hirviendo por 5 minutos.

Te recomendamos guardar las pezoneras esterilizadas en un contenedor de plástico previamente esterilizado.

Si la pezonera muestra signos de desgaste excesivo (producidos por el deterioro normal del uso), reemplazar la pezonera de inmediato.

Nunca trates de agrandar los orificios de succión de la pezonera, esto podría causar roturas en el material de la misma. Por favor, nunca uses las pezoneras como chupetes, ni dejes que tu bebé juegue con ellas, no son un juguete.